Visitar Delfos: guía e historia del oráculo de Apolo ❤️

Última actualización 06/02/2024 por Eva Abal

Para visitar Delfos hay que acceder por la carretera que discurre, serpenteante, a merced del mítico Monte Parnaso. Allí donde el oráculo vertió sus profecías hay en la actualidad uno de los yacimientos arqueológicos más importantes de Grecia.

Además del yacimiento, Delfos cuenta con un museo muy interesante y un pueblo precioso que ofrece vistas del valle y, a lo lejos, el mar. ¡Haz tus consultas al oráculo!

Delfos, el ombligo del mundo

Delfos es un lugar que desde sus orígenes ha estado cargado de leyendas y misticismos. Estaba considerado como el ombligo del mundo y su importancia fue tal que abarcó desde el periodo micénico hasta la llegada de los romanos.

Acorde a la mitología griega, la piedra ónfalo (que verás en el museo) fue colocada por Zeus justo en el centro del mundo. Y allí sigue.

El mito dice que Zeus decidió establecer un oráculo en el centro del mundo. Para encontrar el lugar adecuado, soltó dos águilas, la primera volando hacia el este y la segunda hacia el oeste. Las dos águilas se encontraron sobre Delfos indicando que este era el centro del mundo, el omphalos u ombligo de la tierra.

¿En qué parte de Grecia está Delfos?

Vale, Delfos es el ombligo del mundo. ¿Pero en qué parte de Grecia está Delfos?

Pues como no podía ser de otro modo, está en una ubicación privilegiada, a medio camino entre Corinto y Patras, en el Peloponeso y también en buena ubicación para ir desde Atenas o desde Meteora.

Cómo llegar a Delfos desde Atenas

Para llegar a Delfos desde Atenas puedes hacerlo de tres maneras: en coche, en bus o en excursión.

Para llegar a Delfos en coche, que es lo que yo hice, se tarda unas tres horas y la ruta es muy bonita, sobre todo una vez que se entra en la zona montañosa. Muy recomendable hacer una paradita en Aráxova.

Cómo llegar a Delfos en autobús

Si quieres visitar Delfos y quieres ir en autobús tienes que tomar uno de los buses KTEL. KTEL es un servicio público de autobuses que funciona por prefecturas. Para ir de Atenas a Delfos en autobús, tienes ir a la terminal Liossion, ubicada en la calle Liossion 260, en Atenas. Desde allí sale KTEL Fokidas, que une Atenas con Delfos.

El precio para ir en autobús de Atenas a Delfos está en torno a los 15 euros. En la web que te pongo de KTEL Fokidas puedes comprar el billete online. Recuerda que al buscar tienes que poner «Athens» para Atenas y «Delphi» para Delfos. En cuanto a los horarios, ya ves que hay cosas que aunque tengas la web en inglés, siguen en griego. Si tienes dudas, déjame un comentario y te ayudo.

Si quieres ir en bus desde otro punto, consúltame y te busco el KTEL correspondiente.

Visitar Delfos: Excursión a Delfos desde Atenas

La tercera opción para visitar Delfos es hacerlo en una excursión. Tienes varias opciones:

• Ir y volver a Delfos en un día desde Atenas: la puedes reservar aquí. Incluye entrada al yacimiento, transporte y visita guiada en español.
• Excursión de dos días a Delfos y Meteora desde Atenas: la puedes reservar aquí. Incluye entradas, transporte, hotel, cena y guía en español.

Por si tienes dudas, aquí puedes leer mi artículo sobre los Monasterios de Meteora.

¿Cómo visitar Delfos en Grecia?

Pues como te decía más arriba, puedes llegar en coche, en autobús o en excursión. En cualquier caso, tienes que considerar que necesitarás dos o tres horas para el yacimiento y otras dos horas para el museo.

Pero además de la parte arqueológica, te recomiendo que te des una vuelta por el pueblo. Es turístico, pero es pequeño, acogedor y muy bonito. Por lo tanto, algo que ver en Delfos es el propio Delfos pueblo.

Visitar Delfos: qué ver

El complejo arqueológico es la principal visita en Delfos. Por un lado está el yacimiento y por el otro el museo. El conjunto es Patrimonio de la Humanidad. Para acceder, se puede comprar una entrada combinada que permite el acceso a ambos sitios.

Lo ideal, bajo mi punto de vista, es visitar el museo de Delfos primero y el yacimiento después. Por una razón: porque si no visitas el museo no comprenderás lo que hay en el yacimiento. Y visitar Delfos para no enterarse de nada es tontería. Por tanto, una cosa que ver en Delfos es el museo.

La entrada se puede usar dos días seguidos. O sea, el día que llegues por la tarde, visita el museo y al día siguiente, temprano, antes de que el sol te abrase, vete al yacimiento. Todo el complejo está a un kilómetro del pueblo y puedes ir en coche (hay aparcamiento) o bien dando un paseo. Cosa número dos que ver en Delfos: el yacimiento.

Esta es la web oficial del complejo. Si vais a visitar Delfos os recomiendo revisar precios y horarios aquí. Para comprar la entrada a Delfos puedes hacerlo allí mismo, y también se venden online en la web oficial del Ministerio de Cultura de Grecia.

Visitar Delfos: el museo

El museo de Delfos recorre la historia de todo el complejo desde sus inicios hasta la romanización. Además, en su interior se conservan pedimentos de varios templos, columnas maravillosas, esculturas y varios tesoros.

En el museo hay paneles informativos con muchos detalles que ayudarán al visitar Delfos y también con imágenes que recrean cómo era el complejo en su época de mayor esplendor.

Hay que considerar que toda esta zona fue sacudida por terremotos en varias ocasiones, por lo que el museo ayuda mucho en la comprensión de todo el mundo de Delfos.

Además de lo que ya he indicado, esculturas, columnas, paneles y otras joyitas, el museo también cuenta con la piedra ónfalo (de la que hablo arriba) y con el auriga de Delfos.

El auriga de Delfos es de gran relevancia por ser la única escultura de bronce de tamaño humano que se conserva de la época clásica. Esto sucedió gracias a las casualidades en las que un terremoto la enterró hasta su descubrimiento en 1896.

Los gemelos de Argos son otro ejemplo de esculturas que se pueden ver en el museo. Estas son especialmente llamativas por el buen estado de conservación y por la rareza que representan y porque son de los exvotos monumentales más antiguos del periodo arcaico.

Visitar Delfos: el yacimiento

Si vas a visitar Delfos, dentro del yacimiento la parte más famosa y llamativa es la dedicada a Apolo. Allí están los restos del que fue un enorme templo dedicado al dios Apolo y donde estaba el oráculo. Toda la zona que rodea al templo de Apolo está salpicada de otros templos y de templos menores, denominados tesoros.

Tanto los templos como los tesoros eran construidos por visitantes del oráculo, que lo hacían para pedir favores a éste, que este intercediese por ellos o incluso tener prioridad en consultar al oráculo.

En el santuario de Apolo también hay un gran teatro y un estadio, ambos en magnífico estado de conservación. Aunque el plato fuerte del santuario es el Templo de Apolo en Delfos.

Templo de Apolo en Delfos

Los orígenes del Templo de Apolo en Delfos son del siglo VII a.C, si bien lo que se conserva a día de hoy data del siglo IV, ya que los terremotos asolaron las construcciones anteriores.

En el yacimiento algunas columnas están en pie, pero en el museo se conservan buena parte de las estatuas de los pedimentos. Aunque sin duda, uno de los atractivos a este Templo de Apolo es el mítico oráculo de Delfos.

Según la mitología, el oráculo antiguo estaba custodiado por una enorme serpiente llamada Pitón. El dios Apolo logró matar a la bestia y entonces el oráculo pasó a su propia jurisdicción. Y he aquí la historia mitológica que se cree que dio origen al primer templo de Apolo en Delfos.

¿Te suena la palabra Pithia? Pues sí, es de la que ha derivado el término actual pitonisa. Se sabe que la elección de estas pithias (podía haber más de una para poder atender a todo el mundo) se hacía sin ninguna distinción de clases. Solo se pedía que fuese una persona de vida y costumbres irreprochables. Bueno, eso y que quisiesen vivir dentro del santuario hasta el final de sus días.

El oráculo de Delfos

El oráculo solamente se celebraba un día al mes, concretamente el día 7, pues se consideraba la fecha de nacimiento de Apolo. Por lo que la espera para consulta podía ser larga. Así que, básicamente, los que querían tener prioridad, daban ofrendas a los sacerdotes del oráculo o construían templos llenos de objetos valiosos (los tesoros). Y con esto, compraban el favor de los sacerdotes, nexo con Pithia (el oráculo).

Los consultantes eran gente de todo tipo, si bien el dinero daba preferencia. Se purificaban con agua de las fuentes de Delfos y se establecía el orden de consulta. Una vez establecido el orden, se pagaban las tasas correspondientes. Después se hacía un sacrificio y finalmente el consultante enviaba las consultas a Pithia.

La Pithia se hallaba sobre una grieta profunda de la roca. Por esa grieta emanaban unos gases que hacían que la mujer entrara en trance y su cuerpo se agitara. Vamos, que probablemente estaría colocada (aunque de esto no tenemos testimonio).

Una vez inspirada, la Pithia daba respuestas y posiblemente (aunque no hay nada que lo confirme) un sacerdote las interpretaba y escribía en forma de verso. Hay que tener en cuenta que la Pithia no podía abandonar el templo.

Delfos fue muy importante en el mundo antiguo ya que se convirtió en lugar de paso obligatorio para conocer las decisiones que los dioses tomaban sobre el destino de los hombres.

Santuario de Atenea Pronaica

Es el otro santuario del complejo de Delfos. Es la parte que estaba dedicada a Atenea y entre sus templos el más llamativo y mejor conservado es el tholo o tolo. Estas edificaciones, en la arquitectura de la antigua Grecia, eran construcciones de forma circular.

Este tholo es muy representativo y se construyó en el siglo IV a.C, con 20 columnas a su alrededor, de las que solamente hay tres reconstruidas.

Leónidas y el oráculo de Delfos

Hubo una vez en la que el oráculo de Delfos arrojó una profecía a los espartanos y les avisó:

Si no queréis que Esparta caiga, habrá de morir un rey espartano.

Los espartanos no estaban para mucho juego, dado que la amenaza de los persas era inminente. Aunque Grecia había ganado las Primeras Guerras Médicas con una victoria decisiva en la batalla de Maratón, los persas tenían dinero y esclavos. Así pues, el ejército persa, en esta ocasión con Jerjes al mando, pronto preparó la armada más grande que ha conocido el mundo para invadir a las polis nuevamente.

Las guerras médicas fueron una serie de conflictos entre el imperio Persa y las polis griegas que comenzaron en el 490 a.C. y se extendieron hasta el año 449 a.C.

Y empezaron las Segundas Guerras Médicas. En estas, las batallas más famosas son las Termópilas y Salamina. Y en Termópilas estuvo involucrado Leónidas, el famoso rey espartano. ¿Te suena el rey de la película 300? ¡Pues ese!

Los espartanos eran bastante rudos y tenían unas tradiciones muy particulares. Si los niños pequeños no tenían pinta de llegar a ser buenos guerreros, se sacrificaban y listo. Y si se iba a la guerra, era preferible que los soldados volviesen muertos a volver derrotados. De ahí la frase:

Regresa con tu escudo o sobre él (muerto)

Esa frase aún resuena en Grecia, ya que mucho tiempo más tarde, en 1821, cuando comenzó la reconquista contra el imperio otomano, marcaría toda la revolución: «Libertad o muerte» (Eleftheria i thanatos). Pero esa es otra historia. Volvamos a Leónidas.

¡Esto es Esparta!

En Termópilas, no lejos de Delfos en dirección hacia Meteora, pasó lo que tenía que pasar. Los espartanos eran espartanos sí, pero eran pocos. Las historias cuentan que eran 300 contra miles de persas. Aunque las crónicas oficiales dicen otra cosa. Sea como fuere, les dieron candela de la buena a los persas con una estrategia increíble. Pero, cuando estaban a punto de la victoria, un traidor se cambió de bando y (ojo, spoiler) terminó por caer Leónidas. Y con él, se perdió la batalla. Pero la estrategia de Leónidas hizo ganar tiempo a las polis, lo cual ayudó a ganar después la batalla de Salamina.

Te animo a leer la crónica completa de Termópilas porque es muy interesante. O al menos, aunque tiene sus puntos de ficción, ver la película de 300.

Los Juegos Píticos

Los Juegos Píticos fueron los segundos juegos panhelénicos más importantes de Grecia después de los Juegos Olímpicos (de Olimpia, en el Peloponeso). Según la tradición, después de que Apolo asesinara a Python, estableció concursos musicales para conmemorar ese evento.

Los juegos panhelénicos eran un conjunto de juegos que se realizaban en Olimpia, Delfos, Corinto y Nemea, en Grecia. Cada uno de ellos se celebraba en honor a un Dios específico.

El inicio de los Juegos Píticos se remonta a principios del siglo VI a.C. Inicialmente, los juegos tenían lugar cada 9 años, la misma cantidad de tiempo durante la cual Apolo estuvo ausente para limpiarse del asesinato de la bestia.

Más adelante, los juegos se reorganizaron siguiendo el modelo de los Juegos Olímpicos y se realizaban cada 4 años, el tercer año de cada Olimpiada.

Si quieres saber más o está en tus planes viajar al Peloponeso, aquí puedes leer qué ver en Olimpia, una guía para visitar el lugar donde nacieron los Juegos Olímpicos.

Dónde dormir al visitar Delfos

La oferta de alojamientos en Delfos es muy variada. Yo me quedé en Pan Hotel por un precio asequible con un desayuno sencillo pero bueno. La habitación ofrecía unas vistas muy agradables y el dueño es un señor muy majo. Si quieres comparar opciones, este es el listado de alojamientos de Delfos.

Como ves, visitar Delfos en Grecia no es hacer check. Como todo lo que está relacionado con la historia de este país, hace falta tiempo, leer y masticarlo. Hay mucho que ver en Delfos y es importante respetarlo y sobre todo, comprenderlo. ¡Que el oráculo te traiga suerte, amigo!

Eva Abal

Desde 2012 escribo este blog de viajes que se basa en mis propias experiencias. Aunque he viajado por medio mundo, hay destinos con los que estoy casi obsesionada y en los que prácticamente he centrado este blog: Galicia (mi tierra natal), Polinesia, Grecia, Argentina, Namibia y Chile. Hablo de estos lugares con conocimiento profundo y rigor, mostrándolos siempre desde la realidad sin edulcorar y el respeto.

Aunque soy Ingeniera Superior de Telecomunicaciones, no ejerzo desde 2018, momento en el que centré mi trabajo en la escritura de viajes. Soy una persona con muchas inquietudes, por lo que además de escribir este blog, también lo he hecho para revistas como Condé Nast Traveler o el blog de IATI Seguros. En estos años he participado con una sección de viajes en Quen Anda Aí de la Televisión de Galicia y como ponente en diversos eventos, como la V edición de Fairway, el Foro del Camino de Santiago.

En 2020 fui finalista a Mejor Blog Revelación en los Premios IATI y me han entrevistado en múltiples ocasiones, como en este reportaje de mujeres viajeras de El Diario o este otro de La Voz de Galicia que se centra en mi viaje de vuelta al mundo.

Aquí puedes leer más sobre mí, así como consultar mi portfolio y mi media kit.